Sentirse cansado todo el tiempo no es normal. Si duermes bien pero aún te sientes agotado, podría deberse a causas hormonales, psicológicas o físicas.
1. Estrés crónico El estrés continuado eleva el cortisol y agota al organismo, generando ansiedad, insomnio y fatiga.
2. Hipotiroidismo La tiroides regula el metabolismo. Si produce pocas hormonas, puedes sentir frío, ganar peso y tener poca energía. Un perfil tiroideo (TSH, T3, T4) ayuda a detectarlo.
3. Deficiencia de vitaminas Bajos niveles de hierro, vitamina B12 o vitamina D también pueden causar fatiga persistente.
La fatiga constante merece atención. Con algunos análisis simples se puede identificar la causa y encontrar una solución.